FiscalíasRegión de Valparaíso

20/03/2015

Fiscalía logró condena de miembros de “enjambre vandálico de niños bichos” por atentado en Viña del Mar.

Tres años y un día de presidio, con libertad vigilada de 4 a 5 años.

Los tres jóvenes junto a sus defensas, ante el tribunal de garantía de Viña.

La Fiscalía obtuvo esta mañana una condena de 3 años y un día de presidio contra los tres estudiantes acusados de incendiar una camioneta en Viña del Mar, en julio del año pasado.

Los integrantes del autodenominado “enjambre vandálico de niños bichos”, Andrés Fuchslocher, Sebastián Lobos y José Manuel Opazo, reconocieron en juicio abreviado los hechos imputados y antecedentes presentados por la Fiscalía.

De esta forma, se les juzgó bajo las reglas del procedimiento abreviado, durante el cual el fiscal jefe de Viña del Mar, Pablo Avendaño, pidió una pena de 5 años contra cada uno de ellos, la cual fue rebajada por el tribunal viñamarino en consideración a que se les reconoció las atenuantes de irreprochable conducta anterior y colaboración sustancial en el esclarecimiento de los hechos.

Los tres sujetos fueron descubiertos por la Fiscalía gracias a un complejo trabajo de recopilación de imágenes de cámaras públicas y privadas de televigilancia de distintos puntos de la ciudad, que permitió reconstruir los pasos de vandálicos del grupo antes, durante y después del atentado.

Ante el cúmulo de pruebas reunidas, los jóvenes de manifiesta tendencia anarquista, una vez ubicados y detenidos, reconocieron absolutamente su participación en los hechos, y durante el juicio de esta mañana expresaron a través de sus defensas arrepentimiento por el ilícito perpetrado.

Este caso fue investigado por un equipo especial de fiscales encomendados para ello por el Fiscal regional, Pablo Gómez Niada, los que en conjunto con ambas policías lograron aclarar tres atentados perpetrados en la zona a mediados del año pasado.

Todos estos casos ya fueron resueltos con la identificación de sus autores. Uno de ellos fue perpetrado (con bombas de ruido) en un centro comercial de Viña por un menor de edad que fue entregado por la Fiscalía a los tribunales de Familia. Otro fue este atentado incendiario perpetrado en el plan de la ciudad; y un tercero fue el atentado con bomba de ruido perpetrado por estudiantes en una sede universitaria en Quillota. De los tres, este es el primero que termina en condena.

El fiscal Avendaño señaló que lo importante para la Fiscalía era descubrir a los autores de estos hechos y llevarlos ante la justicia para que se aplicarán las penas conforme a la ley, lo que se consiguió.