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Los hechos se remontan al 8 de noviembre del año 2019, pasadas las 19 horas, cuando la casona ubicada en Avenida Vicuña Mackenna 44 fue consumida por el fuego en medio de las manifestaciones que se realizaban en el sector de Plaza Italia.

Al respecto el imputado Alejandro Carvajal Gutiérrez  fue acusado de "que en circunstancias de que las llamas quemaban unas cortinas del inmueble, se aproxima y arroja un líquido combustible acelerante que se contenía en un recipiente que llevaba consigo, contribuyendo a aumentar y expandir el fuego que ya se había iniciado al interior del edificio".

Además, ayer se presentaron dos acusaciones respecto de otros dos imputados por los delitos de lanzamiento y confección de bombas molotov.

En el caso de un menor de edad, se le imputan conductas ocurridas el 20 de noviembre, a las 18:45, en la esquina sur oriente de avenida Providencia con Vicuña Mackenna, donde arroja una bomba molotov a un vehículo de Carabineros y posteriormente lanza un artefacto incendiario a un piquete de funcionarios de carabineros. La pena solicitada asciende a cinco años de régimen cerrado.

También se presentó acusación respecto del imputado Ibrhim Acevedo Carmona  por los delitos de porte de artefacto incendiario,  y por arrojar molotovs  a funcionarios de carabineros en la vía pública el día 26 de octubre, pasadas las 18 horas en la acera sur oriente de la entrada principal del metro Baquedano. Por el delito de porte de artefacto incendiario se solicitó pena de 4 años de presidio y por tres delitos de arrojar bombas molotov tres penas de 4 años.

El fiscal Álvaro Pérez, fiscal Jefe de Ñuñoa Providencia, explicó que "se han presentado estas tres acusaciones todas por delitos graves. Las altas penas solicitadas son proporcionales al peligro concreto que se vieron expuestos los funcionarios de carabineros en su integridad corporal y su vida.  En relación del delito de incendio, a la devastación y entidad del daño producido".